Un objetivo: mejorar la rentabilidad en el punto de venta
Determinar el surtido eficiente analizando su rendimiento por metro lineal es una tarea básica en el comercio moderno. Adecuar el espacio disponible de cada producto a la importancia que tiene dentro de su categoría, una necesidad.
Para eso es necesario disponer de un cálculo de rentabilidad, sobre ventas o beneficio bruto, que evalúe el espacio actual, advierta de las ineficiencias y proponga nuevas soluciones de implantación. Con ello conseguiremos adaptar el surtido, ubicar los productos en el nivel óptimo y mejorar la revisión periódica de esa categoría.
Un plan: gestionar bien el espacio
No se debe olvidar que el espacio es limitado (y caro) Por eso optimizar cada centímetro del lineal es tan importante, pero no a cualquier precio; hay que facilitar la visibilidad del producto, su acceso y su exposición lo más atractiva para activar el deseo de compra.
Recomendamos 3 acciones básicas;
- definir una gama coherente con nuestra estrategia (posicionamiento) para no tener todo de todo y dar un servicio lo más completo
- ubicar el máximo de stock en el lineal -evitando así faltantes, pérdidas en el almacén y tiempo de reposición
- apostar por la cartelería, señalética y elementos publicitarios que complementen la exposición de ese surtido sin invadir su espacio ni distorsionar el conjunto
Un método: cooperación entre proveedor y retailer.
La idea de cooperación es una de las claves para el desarrollo del merchandising de gestión. Las estrategias deben basarse en el respeto y la confianza mutua.
Respeto en el conocimiento que cada uno tiene;
- el proveedor, con una visión global del mercado, conoce los productos que comercializa y los de la competencia
- el minorista posee una visión cercana a los consumidores, ya que trabaja con ellos cada día, y es quien gestiona los recursos claves para la venta: espacio y equipo humano
La confianza en que el beneficio de uno lo es también para el otro permite ser más transparente en la gestión de la información, tan necesaria para innovar. Compartir información multiplica el conocimiento del mercado adaptándose a la demanda y generando nuevas oportunidades de negocio para todos.
Una herramienta: el planograma
Es un documento gráfico donde se detalla como se implantará un surtido en el lineal. Los programas informáticos de gestión del espacio permiten aumentar la calidad y la cantidad de planogramas en explotación. Como herramienta de diseño hay que destacar su precisión, su economía y su adaptabilidad. Al proveedor le permite adecuar sus implantaciones a cada retailer, personalizando y añadiendo valor a su relación de colaboración.
Como herramienta analítica permite generar informes de resultados por módulo o metro lineal, necesarios para la toma de decisiones y alcanzar los objetivos de rentabilidad.
El planograma no es un fin: es el medio para desarrollar un merchandising de gestión avanzado y eficiente. Pero no es útil si desconocemos los objetivos, no tenemos un plan y erramos en el método.